Si el Gobierno quiere alcanzar ingresos anuales por $10 mil millones, con las agroexportaciones, el sector público y privado deben seguir trabajando para mejorar los trámites, abrir nuevos mercados y desarrollar más infraestructura moderna, concluyó el seminario Agroexportación, que realizó la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (Comexperú).
La gerente general de ese gremio empresarial, Jessica Luna, destacó la importancia del desarrollo de la agricultura, que en poco más de 15 años logró superar los $ 7 mil millones en exportaciones al año, ayudando a recudir la pobreza, la informalidad y mejorar la competitividad del sector. “Gracias a las condiciones del mercado, la estabilidad jurídica y el esfuerzo empresarial se ha producido una verdadera revolución de la agricultura y del campo”, indicó.
Agregó que si el país quiere seguir manteniendo y expandir esos resultados, es fundamental mejorar las condiciones que han permitido esos logros, como la ampliación del régimen agrario y la continuación de las obras de infraestructura que están paralizadas.
En tanto, la Viceministra de Comercio Exterior, Sayuri Bayona, aseguró que el Gobierno se ha propuesto superar los $52 mil millones en exportaciones para este año, para lo que se ejecuta el Plan Estratégico Nacional Exportador al 2025 (con más de 75% de avance).
Dijo que ese plan se desarrolla en cuatro pilares: diversificación de mercados e internacionalización de las empresas, en el desarrollo de la oferta exportable y facilitación del comercio, en la eficiencia de la cadena logística internacional y el desarrollo de la capacidad exportadora de los productores.
El director ejecutivo de la Asociación de Gremios de Agroexportadores del Perú (AGAP), Gabriel Amaro, señaló que los trámites en la administración pública se han convertido en un verdadero laberinto para los productores agrarios, tanto por la cantidad de trámites que deben realizar como por las quince instituciones públicas involucradas.
Por ello lamentó que existan proyectos de inversión paralizados en los más diversos sectores del país, por trámites burocráticos, haciendo perder recursos a las empresas e inversionistas, al Estado, porque no puede recaudar impuestos, y a la sociedad en su conjunto, porque no se genera valor ni tampoco pueden crearse más puestos de trabajo.