Son siete organizaciones del valle que lograrán obtener ganancias por más de S/ 165,000 en la primera campaña.
Un total de siete organizaciones de cacaoteros del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), promovidas por la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), concretaron la venta de 20.52 toneladas de cacao de calidad a la empresa Ecoandino, cuyo destino final será los mercados de Europa y Norteamérica.
Se trata de familias asociadas del norte, centro y sur del Vraem que acopiaron la primera cosecha de la campaña de este año, logrando obtener 165,491 soles en ingresos por esta venta. La venta contribuye a dinamizar la economía de las familias agricultoras dedicadas al cultivo del cacao en este valle.
En el norte, las familias pertenecen a la Asociación de Productores de Santa Rosa de Chiriari de los distritos de Mazamari, Pangoa y Río Tambo, que acopiaron 10,039 kilos. Mientras que en el centro y sur del valle pertenecen a seis asociaciones de los distritos de Santa Rosa, Villa Virgen, Anco y Villa Kintiarina, que acopiaron 10,020 kilos, cumpliendo las especificaciones técnicas de granos que garanticen su calidad.
MERCADOS CON ALTA DEMANDA
Cabe indicar que los granos y su posterior transformación en chocolate, nibs, polvo, manteca, cascarilla y pasta de cacao llegarán a los países de mayor demanda como Australia, Reino Unido, Alemania, Francia, España, Noruega y Estados Unidos.
A través del trabajo de asociatividad, Devida, fortalece las capacidades técnicas y de articulación comercial de estas organizaciones a fin de concretar ventas a gran escala. La iniciativa forma parte de la implementación de la Estrategia de Desarrollo Vraem 2021, en su segundo año de ejecución en el valle.
El grano de cacao seco se comercializa de manera convencional a los intermediarios a 6.50 soles el kilo, pero tras el acuerdo de acopio en grandes volúmenes se consiguió vender entre 8 a 8.50 soles, generando mayor ganancia a favor del productor.
Para garantizar la calidad de grano de cacao, especialistas acompañan a los miembros de estas organizaciones en el proceso de poscosecha desde la correcta selección de mazorcas, cosecha selectiva, fermentado, secado y adecuado almacenamiento, para su posterior prueba de control de calidad desde la homogeneidad, humedad e impureza.
Las labores de campo, durante el proceso productivo y acopio de granos, se realizaron respetando las disposiciones de higiene y seguridad dispuestas por el gobierno en el marco de la emergencia sanitaria por el covid-19.
FUENTE: Andina