Un balance hídrico ajustado a cada sector, así como un monitoreo en tiempo real para detectar las necesidades de la planta son algunas de las ventajas que ofrece el monitoreo de riego en los cultivos, señala especialista de Kilimo.
La gestión del agua dentro del sector agrícola es esencial. No solo para la calidad del cultivo, sino para combatir la escasez hídrica que amenaza con crecer en el mundo, según la ONU.
En el mundo, el sector agrícola utiliza el 70% del agua disponible, según el Banco Mundial, y ese porcentaje es aún mayor en el agro peruano. Frente a esto, el monitoreo de riego en la agricultura se hace indispensable para un buen manejo de este recurso y de esa manera combatir el cambio climático. Siendo así, Rodrigo Tissera, cofundador de Kilimo, comenta tres ventajas que ofrece el monitoreo de riego en los cultivos.
● Recomendaciones específicas de riego para cada sector: Los productores que monitorean el riego de sus cultivos toman decisiones más acertadas en torno al recurso hídrico que utilizan. Esto es consecuencia de las sugerencias que pueden obtener de una plataforma de monitoreo que se nutre de los datos del campo. Informaciones como ingresos y egresos del agua en el sector de riego, precipitaciones de la zona, planta y suelo son claves para establecer recomendaciones en base a las necesidades hídricas de cada sector de riego.
● Coeficiente de cultivo específico El monitoreo de riego utiliza imágenes satelitales para visualizar los diferentes sectores del riego. Gracias a estas, se puede obtener el NDVI (índice de vegetación por diferencia normalizada) con el cual es posible hallar el valor del coeficiente específico de cultivo (KC). De esta forma se determina la evapotranspiración. Midiendo de parcela en parcela, se puede generar curvas de KC a lo largo del tiempo, que combinado a información meteorológica, se puede determinar la demanda hídrica del cultivo de manera diaria y específica.
● Negocios más sostenibles y rentables: Uno de los retos del agro peruano es hacer sus negocios más sostenibles y rentables usando menor cantidad de recursos. Con la adopción del monitoreo de riego dentro de los cultivos, los negocios no solo reducen el uso del recurso hídrico en hasta un 25% dependiendo del cultivo, sino también el uso del recurso energético hasta un 12% como máximo. «Las empresas agroexportadoras y agricultores no solo se vuelven más rentables por emplear menor cantidad de recursos con estas plataformas, sino que también tienen más oportunidades de ganar un lugar en mercados que exigen el uso eficiente del recurso agua», añadió Tissera.
Además, el cofundador de Kilimo comentó que las consecuencias de las buenas prácticas hídricas en la agricultura se verán en un mediano o largo plazo, cuyo único beneficiario será la humanidad en general. Por eso, añadió que es necesario una mayor consciencia de la gestión hídrica que atraviesa el mundo y una más eficiente dentro del sector.