Según informó el Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA), los tubérculos de esta nueva variedad, recientemente liberada, tienen forma ovalada, ojos superficiales y cáscara delgada, que facilita el pelado y disminuye la pérdida del producto; además, tiene sabor agradable y un contenido en materia seca (entre 22 y 24%), lo que permite una presentación adecuada, dando como resultado una papa frita crocante.
Asimismo, contribuye al incremento de la productividad agrícola, la rentabilidad del cultivo y mejora de ingresos económicos de los productores de papa, pues se trata de una variedad con alto potencial de rendimiento, logrando por campaña entre 25 y 35 toneladas por hectárea. Tiene una rentabilidad promedio de 126.95 por ciento, significativamente superior a las variedades Canchán, Amarilis, Perricholi y Capiro, cuyo promedio es de 67.06 por ciento.
“Aparte de tener una buena calidad industrial para papa frita en tiras, es resistente a rancha, enfermedad que ataca al cultivo en las principales zonas productoras de papa, tiene un período vegetativo medio, y un rango de adaptación bastante amplio, podemos sembrarlo hasta 3,800 metros sobre el nivel del mar”, explicó el coordinador del Programa Nacional de Raíces y Tuberosas del INIA, Rafael Torres Maita.
El especialista dijo que, al ser una nueva variedad, el INIA ya tiene sus núcleos de producción de semilla y al final de la presente campaña se tendrá disponibilidad para la distribución a los agricultores.
Las plantas de procesamiento que se proyecta instalar en el país podrían tener como insumo básico este nuevo producto que ha sido evaluado desde el año 2001 en el ámbito de la Estación Experimental Agraria Santa Ana del INIA en la ciudad de Huancayo (Junín).
Para lograr la papa Shulay, se realizaron trabajos de investigación en comunidades de las regiones Junín, Huancavelica, Huánuco y Pasco, con el apoyo de las asociaciones de agricultores como los comités de productores de Huasahuasi, Jauja y Churcampa.
“Nosotros también somos consumidores, y por eso es que siempre tratamos de identificar las necesidades de los productores con sus productos, en esa perspectiva es que parte de nuestros trabajos están orientados a nuevas variedades que no sólo sean pensadas y trabajadas en producto fresco sino también para dar una alternativa de procesamiento”, remarcó el director de la Estación Experimental Santa Ana del INIA, Carlos Aguirre Asturrizaga.
Destacó que. la papa Shulay, que tiene una particularidad al ser bastante adecuada para la fritura en tiras, por ejemplo es una opción para los negocios de pollerías y en general la gastronomía que utiliza este tipo de tubérculo, “pero también en nuestros programas de investigación se están buscando nuevas alternativas para otros tipos de producción de papa para hojuelas, en nuestros laboratorios tenemos variedades nativas”, acotó.